Los imprevistos familiares, las deudas y el pago de vivienda son algunos de los motivos por los que no se puede hacer frente a las altas cuotas estudiantiles.
Los sueños de poder acabar sus estudios universitarios de una mujer de Atlanta finalmente se están haciendo realidad gracias a la ayuda de un extraño, un pasajero a quien recogió como conductora de Uber.
Latonya Young le contó a WSB-TV que nunca olvidará ese trayecto en su auto.
“Recibí una llamada para ir al estadio Mercedes-Benz. Estaba jugando el Atlanta United”, dijo a la estación de televisión.
La madre soltera de 43 años le contó a su pasajero, Kevin Esch, que tenía dos trabajos, pero a penas llegaba a fin de mes. Trabaja como estilista durante el día y conductora de Uber por las noches.
También había estado estudiando justicia penal en la Universidad Estatal de Georgia, pero lo tuvo que dejar al no poder pagar una cuota pendiente de $700 dólares.
“Cada vez que me preparaba para pagar el dinero, mis hijos necesitaban algo”, explicó Young.
Días después de ese trayecto y mantener esa conversación con el conductor se enteró de que el saldo había sido pagado.
Gracias a eso, pudo regresar a la escuela y obtener su título. Ahora planea continuar estudiando para obtener su licenciatura completa.
