Un niño de 12 años fue apuñalado por la espalda ayer en Taco Bell en El Bronx por otro menor. Fue el último de una serie de incidentes violentos en restaurantes de comida rápida de NY
Un niño de 12 años fue apuñalado por la espalda la tarde de ayer por otro menor de edad dentro de un restaurante Taco Bell en El Bronx (NYC).
Según NYPD, el ataque ocurrió alrededor de la1:45 p.m. dentro del establecimiento de comida rápida mexicana ubicado en 1058 Southern Boulevard, vecindario Longwood, detalló ABC News.
Cuando la policía llegó al lugar encontraron al niño de 12 años con una puñalada en la espalda. Fue llevado al Harlem Hospital en condición estable. Las autoridades dijeron que un sospechoso masculino de 13 años huyó del lugar corriendo hacia la estación del Metro Simpson St, reportó Daily News.
“Es una pena”, dijo el gerente no identificado del restaurante Taco Bell. “¿Dónde están sus padres? ¿Qué pasó con los padres que no sabe dónde están (sus hijos)?”
Según las fuentes los niños estaban discutiendo, pero está claro el motivo de la trifulca. La investigación sigue en curso. No se han realizado arrestos ni identificado sospechosos. Quien posea información debe llamar a 1-800-577-TIPS (8477) y en español 1-888-57-PISTA (74782). También a través de la página crimestoppers.nypdonline.org o por mensaje de texto a 274637 (CRIMES), seguido por TIP577. Todas las comunicaciones son estrictamente confidenciales.
Fue el último de una serie de incidentes violentos en restaurantes de comida rápida de Nueva York desde el año pasado.
La semana pasada un cliente de 65 años fue atacado al azar por un hombre cuando hacía un pedido en un autoservicio de McDonald’s en Brooklyn (NYC), rompiéndole la nariz y las cuencas de los ojos.
El mes pasado una empleada de McDonald’s supuestamente atacó a una cliente en Queens (NYC) con un cuchillo, causándole cortes en la cara y una pierna. También en febrero un par de trabajadores de un restaurante McDonald’s en Midtown Manhattan (NYC) fueron acuchillados por un individuo “enloquecido” que también huyó.
El 23 de enero un joven fue apuñalado en medio de una pelea que se desató en un restaurante McDonald’s también en Midtown. Pocos días antes, dos trabajadores de Taco Bell en Midtown fueron apuñalados mientras intentaban evitar que un par de adolescentes se fueran sin pagar.
En octubre un sujeto apuñaló a otro en un ataque no provocado frente a un restaurante McDonald’s del Lower East Side de Manhattan. Ese hecho ocurrió afuera del mismo establecimiento donde un hombre había aterrorizado a los presentes con un hacha en septiembre.
También ese mes Héctor Manual Valencia Gómez, de 19 años, murió baleado en otro incidente en el estacionamiento de un McDonald’s en Nueva York. Esta semana Gerson Hernández, presunto pandillero Mara Salvatrucha MS-13, se declaró “no culpable” en ese crimen sucedido en Long Island.
A fines de agosto el empleado de un restaurante Wendy’s en Brooklyn resultó gravemente herido tras ser apuñalado en el pecho por un compañero de trabajo. A principios de ese mes un trabajador de McDonald’s de 23 años recibió un disparo en el cuello en Brooklyn y falleció luego de pasar tres días con muerte cerebral y en soporte vital. Como sospechoso fue detenido el hijo de una cliente que se había quejado porque sus papas fritas estaban frías, según testigos.
En marzo de 2022 un cliente fue golpeado brutalmente durante un robo en un McDonald’s en Midtown Manhattan. También ese mes en otro restaurante de esa cadena en East Harlem el empleado hispano Ángel Miguel Salazar (23) fue acuchillado.
Ese apuñalamiento sucedió exactamente dos meses después y a una cuadra del restaurante “Burger King” donde un ex empleado regresó a robar y disparó fatalmente a la trabajadora de 19 años Krystal Bayron Nieves en enero de 2022.
Los jóvenes son cada vez más protagonistas en la violencia armada de Nueva York como víctimas y victimarios, particularmente balaceras y ataques con armas blancas. En septiembre un informe de NYPD encontró que la reincidencia entre los adolescentes había aumentado drásticamente durante los últimos cinco años y el número de pistoleros y sus víctimas menores de edad se había triplicado.
