El número de personas que solicitaron prestaciones por desempleo en Estados Unidos alcanzó la semana pasada su nivel más bajo en cuatro meses, una señal de que los empresarios están reteniendo a sus trabajadores a pesar de los esfuerzos de la Reserva Federal por frenar la economía y contener la inflación.
WASHINGTON (AP) – Las solicitudes de ayuda por desempleo en Estados Unidos para la semana que terminó el 14 de enero cayeron en 15.000, hasta 190.000, desde las 205.000 de la semana anterior, según informó el jueves el Departamento de Trabajo.
La media móvil de cuatro semanas de solicitudes, que puede compensar la volatilidad de una semana a otra, descendió en 6.500, hasta 206.000.
Las solicitudes de subsidio de desempleo suelen servir como indicador de los despidos, que han sido relativamente bajos desde que la pandemia acabó con millones de puestos de trabajo en la primavera de 2020.
El mercado laboral es vigilado de cerca por la Reserva Federal, que subió los tipos de interés siete veces el año pasado en un intento de frenar el crecimiento del empleo y reducir la inflación obstinadamente alta.
A principios de este mes, el gobierno informó de que los empleadores estadounidenses añadieron unos sólidos 223.000 puestos de trabajo en diciembre, prueba de que la economía sigue gozando de buena salud incluso cuando la Reserva Federal está subiendo rápidamente los tipos de interés para tratar de frenar el crecimiento económico y el ritmo de contratación. La tasa de desempleo descendió al 3,5%, igualando su nivel más bajo en 53 años.
Aunque fue un informe sólido, los datos de empleo de diciembre sugirieron que el mercado laboral puede estar enfriándose de una manera que podría ayudar a la lucha de la Reserva Federal contra la alta inflación. Fue el menor aumento en dos años y prolongó la ralentización de la contratación iniciada el año pasado. El crecimiento del salario medio por hora se redujo a su ritmo más lento en 16 meses. Esta ralentización podría reducir la presión sobre los empresarios para que suban los precios a fin de compensar sus mayores costes laborales.
En las previsiones actualizadas el mes pasado, los responsables políticos de la Reserva Federal pronosticaron un crecimiento más lento y un aumento del desempleo para el próximo año y 2024. Se prevé que la tasa de desempleo aumente hasta el 4,6% a finales de 2023. Esto supondría un aumento significativo del desempleo y reflejaría una recesión, que muchos economistas han pronosticado.
Las subidas de tipos aplicadas por la Reserva Federal el año pasado han encarecido los préstamos hipotecarios y los préstamos para la compra de automóviles, así como los tipos de interés de las tarjetas de crédito.
El miércoles, Microsoft anunció en un documento regulatorio que está recortando 10.000 trabajadores, casi el 5% de su plantilla, uniéndose a otras empresas tecnológicas que han reducido sus expansiones de la era de la pandemia.
A principios de mes, Amazon anunció que iba a despedir a 18.000 trabajadores, mientras que la empresa de software Salesforce, propietaria de Slack, dijo que recortaba unos 8.000 puestos de trabajo. Meta, matriz de Facebook, Twitter, DoorDash y otras también han anunciado recortes en los últimos meses.
Alrededor de 1,65 millones de personas recibieron ayudas por desempleo la semana que terminó el 7 de enero, un aumento de 17.000 respecto a la semana anterior.
