Justo cuando crecen las voces en Nueva York para que pronto se cierre la cárcel de Rikers Island, donde 17 presos, han muerto bajo custodia de las autoridades penitenciarias, legisladoras de la Gran Manzana están impulsando un proyecto de ley que busca reducir la población carcelaria de manera segura.
Así lo reveló la concejal Carlina Rivera, presidenta del Comité de Justicia Penal del Concejo Municipal, tras presentar la pieza legislativa, que requeriría que la Oficina de Justicia Criminal del Alcalde (MOCJ) establezca equipos de revisión de la población reclusa en los penales, a fin de identificar aquellos casos que podrían resolverse o que pudieran ser liberados en la comunidad de manera segura.
La líder política manifestó que los equipos de revisión de población carcelaria son “una estrategia innovadora ya implementada” en varias ciudades del país para agilizar el procesamiento de casos y reducir el tiempo innecesario de internos sin condenar que hay en las cárceles, muchos de los cuales padecen enfermedades mentales.
La líder política, de origen hispano, señaló además que urge revisar de cerca a la población en las cárceles, pues se sabe que las personas con enfermedades mentales graves representan de tres a cuatro veces la población carcelaria que la población general.
La política del Bajo Manhattan destacó que los equipos de revisión de la población carcelaria que propone su ley, estudiarían, revisarían y harían recomendaciones informadas sobre quién puede ser liberado de los penales de manera segura.
La meta de la pieza de ley también busca contar con personal suficiente para implementar el plan, y crear esfuerzos para involucrar a los tribunales y fiscales de distrito.
Asimismo, se busca que los equipos que se constituyan, estén compuestos por representantes del Departamento de Correccionales, la Oficina de Justicia Criminal del Alcalde (MOCJ), los Servicios de Salud Correccionales, el Departamento de Libertad Condicional y abogados.