Una madre de dos niños se quitó la vida, después de ser drogada y violada por unos abusadores sexuales que filmaron el ataque.
Jenna Johnson murió el 1 de enero, sin embargo, su familia cree que la terrible experiencia vivida días antes fue el catalizador.
El cuerpo de la joven de 27 años fue encontrado en su casa en Thurso, Escocia, después de que ella no se reuniera con su familia para almorzar en la casa de su madre.
Según se ha comentado en su entorno, Jenna estaba atormentada por la idea de que alguien de su entorno en su ciudad natal se enteraran del asalto que sufrió, informa el Daily Record.
Cuando se encontró el cuerpo de Jenna, fue llevado a Glasgow para un examen forense. Pero las pruebas no fueron concluyentes porque la agresión sexual de los dos hombres ocurrió días antes, en la noche del 22 de diciembre o en las primeras horas del 23 de diciembre.
Jenna les contó a sus amigas íntimas y a su hermana pequeña Kelsey las identidades de los dos hombres que la llevaron a suicidarse. Ahora su familia quiere justicia.
Aproximadamente una semana antes de que muriera, Jenna se había despertado cubierta de moretones y rasguños, con marcas de agujas en un brazo. Cuando su cabeza se aclaró, recordó haber sido seriamente agredida sexualmente por un hombre y violada por otro.
Los dos le dijeron que habían filmado el ataque y amenazaron con publicar el video, burlándose de que eso provocaría la pérdida de sus hijos.
“Queremos que la gente sepa cómo murió Jenna y que los hombres que la violaron y amenazaron no la mataron con sus propias manos, pero son los responsables”, dijo la madre al mencionado diario.
Según los informes policiales no había circunstancias sospechosas en torno a la muerte de Jenna, pero se comentó nada más puesto que la investigación sigue en curso.
