La demanda del príncipe Harry, que acusa al editor del tabloide The Sun de espiarle ilegalmente, puede ir a juicio, pero no por las acusaciones de pirateo telefónico, dictaminó el jueves un juez del Tribunal Superior.
LONDRES (AP) – El duque de Sussex alegó que el editor de The Sun y del desaparecido News Of The World había pirateado su teléfono y se había servido de investigadores y de engaños para recabar ilegalmente información sobre él que se remontaba a dos décadas atrás.
News Group Newspapers (NGN), propiedad de Rupert Murdoch, alegó que la demanda debía desestimarse porque las reclamaciones se presentaron una vez expirado el plazo de prescripción de seis años para hacerlo.
El juez Timothy Fancourt declaró que Harry estaba lo suficientemente al corriente del escándalo de la piratería telefónica como para presentar esas demandas antes, pero que podía seguir adelante con las acusaciones sobre otras actividades de obtención ilícita de información, como el uso de investigadores privados contratados para desenterrar trapos sucios sobre él.
«No hay pruebas actualmente a mi disposición de que el Duque supiera antes del (plazo para presentar una demanda) que NGN había hecho otra cosa que piratear su teléfono móvil (en el News of the World)», escribió Fancourt. «Conocer o estar al corriente de una reclamación válida por interceptación del buzón de voz no equivale por sí mismo a conocer o estar al corriente de una reclamación válida por otras formas de UIG».
Un portavoz de News Group Newspapers calificó la sentencia de «victoria significativa» que «reduce sustancialmente el alcance de su reclamación legal.»
La sentencia fue similar a la que Fancourt dictó en mayo en un caso paralelo presentado por el actor Hugh Grant, que también desestimó las acusaciones de piratería telefónica.
El abogado de Harry había alegado que se le había impedido presentar su demanda debido a un «acuerdo secreto» entre la familia real y los periódicos que exigía un acuerdo y una disculpa. El acuerdo, que según el príncipe fue autorizado por la difunta reina Isabel II, habría evitado futuros litigios de la familia real.
El editor negó que existiera un acuerdo secreto y Fancourt dijo que Harry no había presentado pruebas de tal acuerdo.
Harry había dicho que la razón de ser del acuerdo secreto era evitar que los miembros de la familia real tuvieran que declarar como testigos para relatar mensajes de voz embarazosos interceptados por periodistas.
El caso es una de las tres demandas por piratería telefónica que Harry ha interpuesto contra editores de tabloides británicos en sus batallas con la prensa.
La decisión llega menos de dos meses después de que Harry testificara en su demanda contra los editores del Daily Mirror. Se convirtió así en el primer miembro de alto rango de la familia real que testificaba ante un tribunal en más de un siglo.