La cantante comienza por fin su ansiada mudanza a Estados Unidos junto a sus hijos y sus padres
No es un secreto que Shakira está deseando abandonar Barcelona e iniciar una nueva vida en Miami (EE.UU.), lejos de Gerard Piqué, Clara Chía y todo lo que le recuerde a su amargo pasado junto al padre de sus hijos. La cantante llevaba meses esperando llegar a un acuerdo con Piqué sobre la custodia de los pequeños y, cuando al fin se produjo, el delicado estado de salud del padre de la artista impidió el traslado, previsto para finales de 2022.
Con una nueva fecha fijada para principios de abril, hace unas semanas era la madre de la cantante la que tenía que ser ingresada en el hospital. Sin embargo, parece que las cosas han vuelto a su cauce, porque Shakira ha comunicado a sus allegados y al equipo médico que cuida de sus padres que se va la semana que viene.
Según confirma Vanitatis en primicia, la colombiana se despide de Barcelona para siempre, y ya tendría todo preparado para marcar a Miami. Un viaje que, según el citado portal, se efectuará entre este fin de semana y principios de la semana que viene.
El viaje se producirá de manera escalonada. Primero se marchará la cantante, que llegará a su mansión en Miami Beach para asegurarse que todo está preparado para la llegada de sus padres, William Mebarak y Nidia Ripoll, que aterrizarán unos días después. Los tres vivirán juntos en la residencia de la cantante, a donde también se trasladarán sus hijos, Milan y Sasha, mientras disfrutan de sus vacaciones de Semana Santa, para comenzar en su nuevo colegio.
Un viaje que la cantante ha planeado con sumo cuidado, sobre todo para garantizar los cuidados médicos de sus padres. Su madre se recupera de una trombosis que sufrió hace apenas unos días, mientras que su padre, de 91 años, que fue ingresado en la clínica Teknon de Barcelona y a quien se canceló una cirugía programada para febrero, sin revelarse las razones.
Una vez la cantante y sus hijos comiencen su vida en Miami, el exfutbolista podrá viajar a la capital con la frecuencia deseada a ver a sus hijos. Los gastos de esos desplazamientos correrán a cargo de los dos, según los términos del acuerdo que trascendieron en su día.
Un acuerdo que llegaba después de que Piqué terminase cediendo a las exigencias de la colombiana pues, tal como informamos en La Vanguardia desde un principio, Shakia quiso cortar lazos con Barcelona y trasladarse a Miami. Una mudanza que, previsiblemente, el futbolista no estaba dispuesto a aceptar, pero a la que terminó cediendo, por lo que tendrá que ver a sus hijos creciendo a 7.500 km de distancia.
Finalizada su carrera deportiva, el hasta ahora blaugrana enfoca ahora sus intereses profesionales en un creciente holding cuyo horizonte próximo va a mirar, más que nunca, a América.
