Las autoridades rusas acusaron el miércoles a Ucrania de intentar atacar el Kremlin con dos aviones no tripulados durante la noche en un intento de asesinar al presidente Vladimir Putin.
MOSCÚ (AP) – El Kremlin denunció el supuesto intento de ataque como un «acto terrorista» y dijo que las fuerzas militares y de seguridad rusas «desactivaron» los aviones no tripulados antes de que pudieran atacar. No dio más detalles.
En un comunicado publicado en el sitio web del Kremlin se afirma que los restos de los aviones no tripulados cayeron en el recinto de la sede del Gobierno ruso, pero no causaron daños. El comunicado, que no explicaba qué había provocado la rotura de los drones, afirmaba que no se habían registrado víctimas.
Un vídeo publicado durante la noche en un canal local de noticias moscovita Telegram, que parecía haber sido grabado al otro lado del río desde el Kremlin, mostraba lo que parecía humo elevándose sobre el Kremlin.
Según el texto que acompañaba al vídeo, los residentes de un edificio de apartamentos cercano informaron de que habían oído golpes y visto humo hacia las 2.30 de la madrugada, hora local (19.30 hora del Este).
Kiev negó categóricamente su implicación en el ataque. «No atacamos el Kremlin porque, en primer lugar, no resuelve ningún problema militar. Por supuesto. Y es extremadamente desventajoso desde el punto de vista de la preparación de nuestras medidas ofensivas», declaró el asesor presidencial de Ucrania, Mykhailo Podolyak.
«Y lo que es más importante, permitiría a Rusia justificar ataques masivos contra ciudades ucranianas, contra la población civil, contra instalaciones de infraestructura. ¿Por qué necesitamos esto?» dijo Podolyak.
El Kremlin no presentó ninguna prueba para respaldar su versión, incluida la acusación de intento de asesinato, mientras Rusia se prepara para celebrar el martes su Día de la Victoria anual.
«Consideramos estas acciones como un acto terrorista planeado y un atentado contra la vida del presidente de Rusia, llevado a cabo en vísperas del Día de la Victoria, el desfile del 9 de mayo, donde se espera la presencia de dignatarios extranjeros», rezaba el comunicado del Kremlin.
Rusia se reserva el derecho a responder «cuando y donde lo considere oportuno».
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró a la agencia de noticias estatal rusa RIA Novosti que Putin no se encontraba en el Kremlin en ese momento y que estaba trabajando desde la residencia de Novo-Ogaryovo.
El Kremlin añadió que Putin se encontraba a salvo y que su agenda no había cambiado. Peskov dijo que el desfile tendría lugar el 9 de mayo, como estaba previsto.
Poco antes de conocerse la noticia del presunto atentado, el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, prohibió el uso de drones en la capital rusa, con una excepción para los lanzados por las autoridades.
Sobyanin no citó ninguna razón para la prohibición, limitándose a decir que impediría «el uso ilegal de drones que puedan obstaculizar la labor de las fuerzas del orden.»
Un legislador que representa a Crimea en Moscú, Mijaíl Sheremet, declaró a los medios estatales rusos que el Kremlin debería ordenar un ataque con misiles contra la residencia del presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, en Kiev, como represalia por el supuesto incidente del miércoles.