La presunta homicida conocía a su víctima y le ofreció ayuda económica durante el embarazo. La bebé, que nació con ocho meses de gestación, se encuentra recluida en un hospital.
Una pareja en Brasil asesinó a una joven embarazada de 23 años para extraerle su pequeña bebé, que tenía ocho meses de gestación.
La joven asesinada era Mara Cristina Ribeiro da Silva, cuyo cuerpo apareció el pasado martes en Joao Pinheiro, en el Noreste de Minas Gerais. Sus restos fueron encontrados con una amplia abertura en el vientre, luego de que los homicidas le extrajeran su bebé, refiere Globo.
Angelina Ferreira Rodríguez, de 40 años, confesó el crimen y está en la cárcel junto con su marido, sospechoso de ser cómplice del asesinato, aunque la mujer ha dicho que actuó sola. La bebé recién nacida se encuentra recluida y estable en un hospital de Patos de Minas, en el Alto Paranaíba.
Detalles del crimen
La pareja de presuntos homicidas fue enviada a una cárcel luego de la denuncia efectuada por los médicos de un centro de salud al que llegó Ferreira Rodríguez, alegando que había tenido un parto. La mujer no presentaba las características de un reciente estado de gravidez y, al negarse a someterse a los exámenes de rutina, los galenos alertaron a las autoridades.
La mujer admitió su crimen ante la policía, y el cuerpo de la víctima apareció al día siguiente. Según su propio testimonio, emborrachó a la embarazada, la ahorcó con un alambre de púas y luego la colgó en un árbol para abrirle el vientre con un cuchillo y sacarle la bebé.
La pareja deberá responder por cargos de homicidio calificado, con una pena que podría ser de hasta 13 años, además de los crímenes conexos a la presentación de un falso parto. La bebé, por su parte, fue atendida en un hospital de la localidad debido a una herida en la cabeza.
Un funcionario policial indicó que la neonata se encuentra bajo cuidado de su padre y su estado de salud es estable. La madre fue enterrada el pasado miércoles en la mañana.
¿Premeditación?
De acuerdo a las pesquisas adelantadas, la homicida era «amiga» de la víctima y le había prestado ayuda durante la gestación. De hecho, Mara tenía una semana viviendo en la casa de la pareja que presuntamente la asesinó.
La tía de Mara Cristina Ribeiro contó que la relación de su sobrina con Angelina Ferreira «se intensificó» cuando esta última supo que la joven estaba embarazada.
«La mujer siempre soñó con tener una niña y cuando vio que mi sobrina quedó embarazada, ella comenzó a ofrecer ayuda. Prestó dinero para hacer el ultrasonido y ayer habló de que iba a comprar el ajuar para ayudar», contó.
El delegado de la policía, Carlos Henrique, indicó que debido a las circunstancias que rodean el caso, es posible que Angelina Ferreira haya premeditado el crimen, «actuando junto con su marido».
