En respuesta al aumento de las cifras de COVID-19 en Rhode Island, el gobernador Dan McKee anunció el miércoles (15 de diciembre) un mandato temporal de barbijos para empresas y locales. La política entrará en vigor el lunes.
La administración dividió el mandato en tres categorías:
-Las empresas y los locales con capacidad para más de 250 personas deberán utilizar barbijos para sus empleados y clientes, independientemente de su estado de vacunación.
-Para las empresas y locales con capacidad para menos de 250 personas, se exigirá el uso de barbijo a los empleados y clientes, a menos que tengan una prueba de vacunación.
-Las oficinas y otros empleadores privados y públicos que no pertenezcan a las dos primeras categorías deberán exigir barbijos o una prueba de vacunación.
Para la prueba de la vacunación, el gobernador dijo que la tarjeta original, una foto de la tarjeta, o un componente de la aplicación puede ser satisfactoria.
McKee dijo que la política será reevaluada en un mes. Estas medidas llegan mientras el número de casos y hospitalizaciones en Rhode Island sigue aumentando. Para ayudar a la tensión en el sistema de salud, McKee dijo que su administración se pondrá en contacto con el gobierno federal para obtener personal médico adicional para ayudar a los hospitales del estado con el personal.
El estado también distribuirá 100.000 pruebas rápidas en las próximas semanas. McKee está solicitando a la FEMA un millón de pruebas rápidas para ser distribuidas por los municipios. Subrayó la importancia de la vacunación y las vacunas de refuerzo.
McKee dijo que espera que el gobierno federal considere necesario un refuerzo para que se considere totalmente vacunado. La Dra. Nicole Alexander-Scott, directora de salud del estado, dijo que es necesario recibir dosis de refuerzo ahora.
«Se necesita esa dosis extra», dijo, especialmente con la previsión de que la omicron se generalice en el estado. Lo llamó la nueva norma.
