Ante la moción del Gobierno del presidente Joe Biden, el juez federal Emmet Sullivan, permitirá que el Título 42 para la expulsión expedita de inmigrantes se mantenga durante cinco semanas.
Sin embargo, el juez aclaró que esa decisión la tomó con “gran resistencia”, debido a que considera como “caprichosa” dicha normativa, la cual fue iniciada por el Gobierno del expresidente Donald Trump.
La medianoche del 21 de diciembre el Título 42 es la hora final de esa política que ha permitido la expulsión de más de dos millones de inmigrantes.
Eso no significa que la frontera sea abierta, sino que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) implementará una nueva estrategia, siguiendo las leyes migratorias, como había adelantado.
Esta política ha sido criticada por defensores de inmigrantes, ya que fue implementada por razones de salud pública, durante el inicio de la pandemia de COVID-19, pero utilizada en los meses posteriores como una estrategia migratoria.
La Administración Biden ha trabajado un nuevo plan de asilo en la frontera, el cual ha aplicado parcialmente, pero se espera que ahora extienda su estrategia, la cual podría incluir entrevistas expeditas a inmigrantes que pudieran tener un caso de asilo y decisiones más rápidas sobre los casos.
Cabe recordar que los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) pueden seguir aplicando el Título 8, el cual señala que una persona puede ser expulsada del país si no cumple con los requisitos de petición de asilo.
La decisión del juez Sullivan fue sobre el caso Huisha-Huisha v. Mayorkas, una demanda colectiva en nombre de las familias de refugiados, cuya batalla legal es liderada por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU).
Organizaciones en todo el país han celebrado la decisión del juez Sullivan.
La Administración Biden ha prometido una política migratoria “más humana” y justa, pero siguiendo las actuales leyes en la materia.
