(CNN) — Más de 45 millones de estadounidenses están bajo alerta de tormenta invernal mientras una poderosa supernevada apunta a la costa este.
Se pronostica que la tormenta golpeará la mayor parte de la costa este de miércoles a jueves, y traerá nieve y hielo pesado que podría causar cortes de energía en toda la región.
Boston y Nueva York podrían recibir hasta 30 cm de nieve, mientras que partes del área de los tres estados podrían ver hasta 40 cm.
«Hay mucha confianza en que esta tormenta invernal tendrá impactos significativos, incluidas interrupciones en los viajes y cortes de energía en gran parte del Atlántico medio y el sur de Nueva Inglaterra», dijo el Centro de Predicción del Tiempo.
Esta tormenta invernal también podría traer ráfagas de viento de hasta 64 km/h que podrían golpear la costa de Nueva Inglaterra, según el Servicio Meteorológico Nacional en Boston.
Trayectoria de la tormenta invernal
El sistema de tormentas saldrá de las Montañas Rocosas hasta el martes, trayendo nieve a las llanuras del sur antes de encontrarse con aire más frío más al este.
Lluvia helada caerá a lo largo de la Interestatal 80 y en las montañas de Virginia, con una posible acumulación de hielo en Roanoke, Charlottesville, al oeste de Beckley, Virginia Occidental.
Una mezcla de precipitaciones se extenderá desde Carolina del Norte hasta Pensilvania, con fuertes nevadas en todo el área de los tres estados y Nueva Inglaterra, según muestran los mapas del Centro de Predicción del Tiempo.
Se esperan acumulaciones de nieve más ligeras desde Indiana hasta New Hampshire para el miércoles, dijo el centro.
Las condiciones de viento fuerte también serán una preocupación. En algunas áreas, especialmente a lo largo de la costa, habrá condiciones de ventisca. Son posibles vientos sostenidos de 40 a 56 km, con ráfagas de hasta 72km/h a veces.
Los transportistas tienen planes de contingencia para la distribución de vacunas
El clima podría hacer que viajar sea muy difícil o incluso imposible en algunas áreas, dijo el Servicio Meteorológico Nacional.
Si bien no se espera que la tormenta tenga un impacto importante en la distribución de la vacuna contra el covid-19, los transportistas han hecho planes de contingencia para tener en cuenta los problemas climáticos.
La tormenta de nieve invernal afectará partes del Atlántico medio hasta Nueva Inglaterra a partir del miércoles, cuando está programado que los repartidores realicen 66 entregas en todo el país. Más adelante en la semana, se enviarán otras vacunas en las cajas de distribución de Pfizer que requieren hielo seco.
FedEx no espera ningún «impacto significativo» en el servicio, escribió el lunes la portavoz de la compañía, Shannon Davis, en un correo electrónico, agregando que continuarán monitoreando el pronóstico.
«Tenemos un equipo de 15 meteorólogos que monitorean las condiciones las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y tenemos planes de contingencia en caso de que veamos condiciones severas», dijo.
UPS, que tiene un equipo interno que monitorea el clima, no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios de CNN.
El general de Operation Warp Speed, Gustave Perna, dijo a los periodistas el lunes que su grupo hace planes que incluyen contemplar muchos problemas diferentes, y que el peor de los casos es un accidente de un vehículo o avión de reparto. El mal tiempo cae en el medio del espectro de problemas, dijo.
Algunas dosis se mantendrán en una «reserva de seguridad» en caso de que surja algún problema.
