Corea del Norte lanzó dos misiles de corto alcance en su mar oriental en la madrugada del miércoles, justo un día después de que Estados Unidos atracara su submarino nuclear en Corea del Sur.
La maniobra se produce en un momento en el que las tensiones entre ambos países siguen siendo elevadas debido a la mayor frecuencia de lanzamientos de misiles de prueba por parte de Corea del Norte y a la llegada del submarino nuclear.
Según el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, Corea del Norte disparó los misiles balísticos desde las proximidades de su capital, Pyongyang, entre las 3.30 y las 3.46 horas del miércoles. Los misiles volaron unas 341 millas antes de aterrizar en las aguas orientales de la península coreana.
El ministro de Defensa japonés, Yasukazu Hamada, también dijo que alcanzaron una altitud máxima de 31 millas y señaló que los misiles pueden haber experimentado una «maniobra irregular.»
El USS Kentucky llegó el martes por la tarde al puerto de Busan, en la que es la primera visita de un submarino nuclear estadounidense a Corea del Sur desde la década de 1980.
«Esta visita al puerto refleja el férreo compromiso de EE.UU. con la República de Corea [Corea del Sur] para nuestra garantía de disuasión ampliada, y complementa el entrenamiento, las operaciones y otras actividades de cooperación militar llevadas a cabo por las Fuerzas Estratégicas para asegurar que están disponibles y listos para operar en todo el mundo», dijeron las Fuerzas de EE.UU. Corea en un comunicado.
Este nuevo lanzamiento se produce una semana después de que Corea del Norte lanzara su primer misil balístico intercontinental (ICBM) en tres meses.
También se produce mientras el Mando de las Naciones Unidas, dirigido por Estados Unidos, y funcionarios estadounidenses intentan negociar la liberación de un soldado estadounidense que cruzó «voluntariamente» la frontera norcoreana desde Corea del Sur. El soldado ha sido identificado como el soldado de segunda clase Travis King, que acaba de ser liberado de una prisión surcoreana donde cumplía condena por cargos de agresión.
En lugar de regresar a EE.UU. en avión, optó por salir y unirse a una excursión a Panmunjom, un pueblo fronterizo de la Zona Desmilitarizada, donde cruzó corriendo la frontera norcoreana, según funcionarios estadounidenses.
Con la colaboración de The Associated Press.