(CNN) – Los contaminantes químicos prohibidos hace más de 40 años aún están teniendo un efecto devastador en la vida marina y podría llevar a la desaparición de la mitad de la población de orcas antes de terminar el siglo.
Eso según un nuevo estudio publicado en el diario científico Science, que encontró que las orcas están en riesgo por los bifenilos policlorados (PCB), que fueron ampliamente usados como enfriadores y en la producción de papel de copia sin carbón antes de que se descubriera que eran altamente tóxicos y cancerígenos.
La producción de PCB fue prohibida en Estados Unidos en 1979 y bajo un tratado internacional, en 2001, pero aún se usan en muchas partes del mundo y no será completamente eliminado sino hasta 2025.
Esto ha llevado a que los PCB se filtren a los océanos, donde están presentando un riesgo particular para los mamíferos marinos en lo más alto de la cadena alimenticia como las orcas. Debido a que los productos químicos no se descomponen fácilmente, la concentración de ellos se acumula en los cuerpos de los depredadores a medida que consumen más y más peces contaminados con PCB.
Para los mamíferos, la contaminación de PCB es intergeneracional, con las madres pasando los químicos a sus crías a través de la leche.
Las orcas son el último eslabón de una larga cadena alimenticia y, por lo tanto, se encuentran entre los más afectados por este problema a lo largo de su vida de 50 a 80 años.
Los investigadores encontraron niveles de PCB de hasta 1.300 miligramos por kilo en la grasa de algunas ballenas, y los estudios muestran que solo 50 miligramos por kilo pueden causar infertilidad y problemas en el sistema inmunológico.