La menor fue abusada por un amigo de su madre.
Una niña de 11 años, abusada por un amigo de su madre, accederá a un aborto legal. El caso está contemplado por la ley vigente y ya tiene la autorización necesaria. Como en Córdoba , por el amparo de una ONG no se realizan abortos en hospitales provinciales, la chica deberá hacer unos 180 kilómetros hasta la ciudad capital para atenderse en la Maternidad Nacional.
El abusador, un hombre de 54 años, está imputado y detenido. La menor fue abusada a fines de 2015 por otra persona, quien fue condenada por el hecho. Se trata de Domingo Rojas, de 63 años, quien debe cumplir siete años de prisión.
En esta oportunidad, el fiscal de Villa Dolores que entiende en la causa, Sergio Cuello, pidió que se preservara el embrión para usarlo como prueba contra el supuesto abusador, mediante una prueba de ADN.
El caso
La madre de la chica la llevó a atender porque tenía dolores abdominales y en los estudios de rutina se detectó un embarazo de diez semanas. Inmediatamente quedó detenido el sospechoso y se lo acusó de abuso sexual con acceso carnal agravado por su condición de guardador y por promoción a la corrupción de menores.
Según datos de la Justicia, el hombre solía quedar a cargo de la chica por algunas horas a pedido de su madre. En una cámara Gesell, la criatura lo identificó y explicó que la atacaba.
La familia, compuesta por la niña, su madre de 42 años y dos hermanos más grandes, vivían en condiciones vulnerables y ahora quedaron a cargo de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la Provincia (Senaf).
Cómo funcionan los abortos no punibles en Córdoba
En Córdoba, en 2013 la ONG Portal de Belén, que trabaja con madres solas, presentó un amparo para que no se cumpliera el protocolo nacional de interrupción legal del embarazo. La Justicia provincial le hizo lugar y el Tribunal Superior nunca resolvió la cuestión de fondo, por lo que los abortos admitidos por la ley no se realizan en hospitales provinciales.
En la Maternidad Nacional de Córdoba sólo hay tres médicas que practican abortos en caso de violación o riesgo de vida. Gladys Ponte, ginecóloga, docente de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Córdoba e integrante del Departamento de Salud Reproductiva de la Maternidad Nacional, es una de esas tres profesionales. Explicó que otra está con licencia por maternidad hasta fines de año, y la tercera trabaja ad honorem y no realiza abortos quirúrgicos.
“Siempre tenemos menores; ha habido muchísimas a las que se les ha podido resguardar el material genético. Son causas judicializadas y a veces se ha podido condenar a los abusadores. También llegan mujeres adultas que no quieren denunciar. Si no denuncia, nosotras hacemos la intervención igual”, comentó Ponte a LA NACION.
