Más de 800 personas que trabajan para Boston han sido suspendidas sin sueldo por no cumplir con el mandato de vacunación contra el coronavirus de la ciudad antes de la fecha límite, dijeron las autoridades municipales.
La alcaldesa en funciones, Kim Janey, anunció en agosto que los aproximadamente 18.000 empleados de la ciudad tendrían que mostrar una prueba de vacunación antes del martes (12 de octubre) o, si no quieren vacunarse, someterse a las pruebas habituales.
Con más del 4% de la plantilla de la ciudad suspendida, la ciudad está haciendo planes para hacer frente a posibles carencias de personal.
«Ahora estamos implementando planes de contingencia para el transporte de autobuses y otras operaciones escolares afectadas por las licencias de los empleados, debido a la vacunación o las pruebas no verificadas», dijo la oficina del alcalde en un comunicado el martes. «Seguimos trabajando estrechamente con nuestra diversa fuerza de trabajo, y nuestros socios sindicales, para asegurar que los empleados tengan acceso a los sistemas de vacunación, pruebas y verificación para cumplir con el mandato».
Los empleados suspendidos pueden volver al trabajo presentando una prueba negativa, dijo la oficina. La ciudad no desglosó las suspensiones por departamentos.
